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CLASES DE FLAMENCO CANTABRIA 2022- 2023

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CLASES DE FLAMENCO CANTABRIA 2022- 2023

¡Comenzamos nuevo año!


Acabamos de entrar en 2023 y no puedo estar más feliz y agradecida, y es que, como ya sabréis mi actividad en Cantabria comenzó en 2019-2020, con una pandemia por medio, y porque no decirlo, con muchas dificultades en el camino. Después de casi 20 años dedicándome profesionalmente a la danza trabajando como bailarina en diferentes compañías, decidí mudarme a este bonito lugar, y nunca hubiese imaginado que la docencia, el poder compartir mi experiencia acercando al flamenco a personas que comparten un mismo sentimiento por él, me aportaría tanto a nivel personal. No ha sido fácil (ni lo es en los tiempos que corren), pero haciendo balance desde el principio hasta ahora, puedo decir que no cambiaria ni uno de los momentos vividos porque pienso que de todo se aprende, y aunque no nos guste, se prende muchísimo de las situaciones que nos ponen a prueba, de hecho, creo que es cuando más se aprende, cuando la vida nos pone obstáculos que debemos superar sea como sea.

Hoy me siento sumamente agradecida, sobre todo por el cariño que me brindan siempre mis chicas y por lo bien que me hacen sentir en cada clase, nos reímos muchísimo y para mí eso es muy importante, que haya un buen ambiente de trabajo es fundamental para un buen funcionamiento. Es por eso por lo que ahora me gustaría hablar un poquito de ellas.

Algunas comenzaron conmigo hace un par de años y ya nos conocemos porque hemos compartido muchos momentos, por eso es inevitable tenerles el cariño que les tengo. Otras hacen poquito que empezaron esta aventura, pero sé que pasara lo mismo, porque el flamenco une y porque he tenido la suerte de coincidir con mujeres estupendas que tienen muchísimas ganas de vivir este arte un poco más de cerca.

Todavía recuerdo sus primeras clases, y es que, los comienzos son maravillosos, pero en ocasiones algo tensos y enrevesados…recuerdo frases como, uf que difícil, ¿tú quieres que hagamos eso? Ni en años lo conseguiremos, imposible, yo no lo veo… Pues si… ¡Lo han conseguido! Han conseguido que lo que les parecía difícil ahora les parezca fácil, han logrado ejecutar giros que parecían imposibles, pies que parecían que les parecía que iban a la velocidad de la luz y que ahora solo van a la velocidad del sonido, marcajes que les parecían difíciles de coordinar y que ahora surgen de sus cuerpos naturalmente, con suavidad y armonía…todo eso lo han conseguido ellas, con su esfuerzo y con su paciencia, con su buen humor y con las ganas que le ponen en cada clase. Soy consciente del gran esfuerzo que hacen no solo en clase, sino por venir a clase. Por eso no le doy importancia si a veces llegan tarde, poque se lo difícil que es compaginar las rutinas del día a día.

Es cierto que todavía nos queda mucho trabajo por delante y que nos tocará vivir momentos de frustración, porque cuando deseas que algo te salga a la primera y por lo que sea tarda un poco más, es lo que sucede, nos ponemos nerviosas, nos desesperamos e incluso muchas veces pensamos en abandonar. Pero los buenos momentos siempre tienen más peso que los malos y en clase los buenos predominan gracias a ellas, gracias a su actitud y a sus ganas de aprender. Es por eso, que al igual que yo seguiré intentado mejorar cada día para poder darles una mejor enseñanza, sé que ellas también lo harán, se seguirán esforzando porque compartimos el mismo sentimiento por el flamenco y porque han demostrado que con constancia pueden afrontar todos los retos que se le presenten.

Normalmente suelo dividir las clases en dos partes, tres cuartos de hora que van dedicados a trabajar técnica, y tres cuartos de hora que están enfocados a la coreografía. A veces esto puede variar ya que tengo que adaptarme a las necesidades de cada momento, pero intento seguir esa línea de trabajo porque creo que de este modo es más productivas para ellas. Igual de importante es el calentamiento antes de empezar y el estiramiento al finalizar, porque nos preparan el cuerpo para la actividad física que vamos a realizar y nos evitan lesiones, por eso suelo hacer bastante hincapié y no pueden faltar en clase.

En esta ocasión he grabado un trocito de clase en el que estamos haciendo técnica. En este espacio trabajamos postura corporal, pies, brazos, giros, equilibrio, precisión y velocidad. No siempre me da tiempo a hacerlo todo, a veces tengo que dedicar mas tiempo a una cosa que a otra para que salga, pero que no me tiempo no significa que se quede sin hacer, se hace la siguiente semana porque está claro es que estos ratitos de técnica dan sus frutos. Es normal equivocarse o no colocarse correctamente, de hecho, creo que el error es necesario para poder mejorar. Como siempre digo, tenemos que equivocarnos para poder saber dónde está esa barrera que nos impide hacer los movimientos que queremos y que es lo que tenemos que hacer para derribarla y conseguir llegar a ese punto que deseamos. Esto suele pasar mucho con los giros, ya que por ejemplo el tema pies es más mecánico. En los giros están involucrados muchos factores como la colocación del cuerpo, de los brazos, de los pies y de la cabeza (muy importante que sea lo último que gira y lo primero que llega a la posición inicial antes de ejecutar dicho giro) porque de no ser así, podemos marearnos y perder equilibrio. No colocarnos de la manera correcta puede hacer que no se vean limpios o en el peor de los casos puede provocar caídas, que es lo que más me preocupa. Hasta ahora no hemos tenido que lamentar daños, pero es cierto que alguna que otra vez hemos tenido algún sustillo, por eso seguiremos practicando porque la repetición es la única manera de conseguir que las cosas nos salgan como queremos. En el video se pueden ver algunas de las distintas formas que hay de trabajar giros (hay muchísimas), también se puede ver como trabajamos cuerpo, brazos, pies y como comenzamos a limpiar el cachito de la coreografía del grupo principiantes de este año, que son unas alegrías. De momento tenemos la salida, primera llamada y primera letra y la segunda llamada.

Bueno, llegando al final de de este pequeño resumen en el que hago un pequeño balance y explico un poquito la dinámica de clase, me gustaría dedicarle unas palabras a una alumna que nos dejó este pasado mes de diciembre.

Eras una mujer fuerte, buena, dulce, familiar, divertida y con mucha sensibilidad hacia el flamenco, te encantaba, lo vivías, lo disfrutabas. Te encantaban tus clases de flamenco, pero también las de sevillanas, eras una apasionada y te esforzabas muchísimo. Así que desde aquí te digo que allí donde estes sigues bailando cada día con nosotras y que nunca dejaras de hacerlo, que te recordaré por siempre con muchísimo cariño al igual que tus compañeras y que vivirás para siempre en mi corazón, te fuiste demasiado pronto…dejaste huella y fue un placer conocerte.

Descansa en paz..

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